Precioso fin de semana, con el campo luciendo unos colores únicos de primavera.

Como siempre, la base durante todo el fin de semana fue el complejo turístico de Riomalo, donde cenamos y desayunamos y nos alojamos, tanto en las cabañas como en el hostal.

El viernes cenamos en el hostal todo el grupo excepto una familia que llegaría un poco más tarde. El sábado todo el grupo al completo empezaba disfrutando de un buenísimo y copioso "desayuno de cazador", típico del lugar.

Después del correspondiente "brefing" y entrega de documentación, nos ponemos en marcha. Hacemos la ruta de los valles hurdanos, que nos llevaría por Rubiaco, Nuñomoral, Cerezal, Robledo, Sauceda y Ovejuela, recorriendo los 5 valles de las Hurdes.

Comida en el espectacular paraje del mirador de los Ángeles, donde pudimos apreciar unos cuantos buitres en vuelo.

Después paseo hacia el puente de los Machos y luego nos dirigimos a Ovejuela, donde aparcamos los coches e hicimos marcha hasta el chorrituelo. El río estaba con mucha agua (había llovido la semana anterior) y la cascada estaba impresionante.

Regreso al hotel, cena y para cierre una queimada preparada, como siempre, por Jaime.

El domingo empezamos visitando el meandro Melero y de aquí por una preciosa ruta al pico Cordón para acabar en Nuñomoral y acercarnos al Gasco, ese pueblo situado en lo más recóndito de las Hurdes.

Comimos al lado del río, cerca del hostal. Despedida y cierre.