Texto: Javier Fernández

 

-- ¡UNA PENA PERDERSELO! --

 

Si todos los años la Clásica es una experiencia fantástica, este año ha sido aun mejor.

 

Las etapas con esa dureza que gusta pero no cansinas, muy bien medidas lo que permitía llegar al hotel a horas razonables, si además ibas en un grupo homogéneo y bien organizado(como es mi caso), se ha podido disfrutar de la gastronomía marroquí, lo cual es un lujo.

 

En cuanto al paisaje este año hemos disfrutado de un itinerario precioso con desfiladeros que ponen los pelos de punta ,bosque de cedros o jamadas como el clásica Ken Ken y por supuesto dunas, sin descontar el lujo que supone visitar Fez o Volubilis, por lo tanto una variedad casi imposible de superar.

 

Los compañeros que han tenido el valor de apuntase al Dessert Trophy han tenido una prueba llena de dificultades que ha puesto a prueba tanto sus habilidades de navegación y conducción como a las propias maquinas y están si fallan, pero no ellos, que han competido hasta el límite de estas. Si reúno el valor suficiente, tal vez me apunte a las próximas ediciones. En cualquier caso creo que esta será una prueba en el futuro que dará mucho que hablar y a la que se apuntaran los conductores intrépidos.

 

Enhorabuena ,desde aquí, al vigente campeón Jose Luis Cuenca y sobre todo a su copiloto Elena que es la artífice de entender los galimatías que prepara Luis Granda .¡estoy seguro que la prueba ganara adeptos en los próximos años!.

 

En cuanto a la organización que puedo decir que no sepáis, la mayoría llevamos varios años participando, ¡por algo será!.Fede y su equipo siempre tan profesional y atento. Muchas gracias.

 

 

Sin mas, quiero despedirme esperando que el año que viene podamos todos reencontrarnos en la próxima edición

Javier Fernández

 

 

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